¿Cómo controlar la Hiperpigmentación post-inflamatoria?

La Hiperpigmentación Post Inflamatoria, también conocida como PIH por sus siglas en inglés, es una afección común que afecta a una gran parte de la población española; se trata de una afección de la piel muy visible, ya que se forman una especie de máculas o manchas en el mismo lugar donde ha tenido lugar el proceso inflamatorio inicial.

Así, la Hiperpigmentación Post Inflamatoria (PIH) es un tipo de hiperpigmentación causada por la inflamación donde se genera un daño en la piel que altera la producción de melanina en zonas donde se ha sufrido esa inflamación.

Se trata de una afección de la piel que puede ser permanente o temporal según la causa y profundidad de la inflación que da origen a la mancha. Cuando la mancha es temporal, puede desaparecer en semanas o, incluso, años, según la profundidad de la mancha, el fototipo de la piel de la persona (si es más clara o más oscura) o si se utilizan tratamientos específicos para acelerar la recuperación de la piel en la zona.

¿Qué es la Hiperpigmentación Post Inflamatoria?

La Hiperpigmentación Post Inflamatoria (PIH) es un tipo de hiperpigmentación causada por la inflamación de ciertas zonas de la piel que puede darse tanto en la cara como el cuerpo y que es común a hombres y mujeres. Por tanto, este tipo de manchas no son causadas por el sol; aunque este puede agravar los síntomas, oscureciendo más de la cuenta las zonas afectadas.

En la coloración de melanina causada por PIH, la inflamación daña y altera la capa basal, de forma que la melanina es liberada y se retiene en los macrófagos de la dermis papilar.

Es causada por distintos factores biológicos como reacción ante distintos factores como las afecciones cutáneas inflamatorias mencionadas como el eczema, el acné, la psoriasis, o la dermatitis crónic, entre otras. En general, los traumas, como las lesiones o cirugías, pueden también alterar la producción de melanina en la zona dando lugar a un tono desigual donde ha tenido lugar la agresión; como en el caso del láser o exfoliaciones químicas muy profundas.

Por otro lado, también puede provocarse por reacciones foto-alérgicas o foto-tóxicas como por reacciones a perfumes, aceites esenciales, bactericidas, tratamientos hormonales antidepresivos, etc. Sería algo similar a lo que ocurre cuando sensibilizamos la piel por contacto con químicos o algunos materiales como la plata, el oro o el arsénico.

¿A quién afecta la Hiperpigmentación Post Inflamatoria?

Si bien todos los tipos de piel pueden padecer la hiperpigmentación post-inflamatoria, es más habitual en tonos de piel más oscuros debido a su alto componente en melanocitos; responsables de producir la melanina que da color hasta las células de la piel. No en vano, el origen de la PIH es el aumento de la producción de melanina. Recordemos en este sentido que la melanina es el pigmento que define el color de la piel de las personas.

Esta temida Hiperpigmentación Post Inflamatoria afecta también más a menudo a las personas con acné; por lo que manipular los brotes no es buena idea porque potencia las marcas y la inflamación (a mayor inflamación, más probabilidad de PIH o más profunda la mancha). En ocasiones, puede originarse por tratamientos cutáneos como la dermoabrasión o el láser; a veces como reacciones naturales y otras por tratamientos mal aplicados o por no tener en cuenta un buen diagnóstico de la piel.

De esta forma, una lesión provoca la inflamación de la piel como en el caso del acné o de cicatrices por heridas. Esta inflamación activa los melanocitos, las células productoras de melanina, para que liberen un exceso de melanosomas (gránulos de melanina). El exceso de gránulos de melanina oscurece o pigmenta la antigua zona de la herida y permanece mucho tiempo después de que la herida inicial haya cicatrizado.

Las manchas por Hiperpigmentación Post Inflamatoria tienen distinto aspecto según el tono de la piel y la profundidad de la afección, pero, en general, son manchas planas. Suelen ser manchas de que bailan entre el color rosa y el rojizo, así como el marrón o el negro en base a la persona.

Debemos tener en cuenta que la memoria de la piel hará que aunque tratemos la mancha y consigamos eliminarla, no estemos exentos de volver a verla aparecer; de forma que es importante no centrar el cuidado solo sobre las manchas, sino también prevenir allí donde ya hemos padecido alguna en algún momento.

Tratamientos contra la PIH

Para tratar la Hiperpigmentación Post Inflamatoria es fundamental un buen diagnóstico que, además de reconocer la mancha como este tipo de pigmentación, examine las causas para acabar con todos aquellos motivos que puedan estar potenciando esa falta de uniformidad en el tono.

Para el diagnóstico, en algunos casos, se puede utilizar una lámpara de Wood para ver la profundidad de la mancha. Incluso, en casos severos se puede solicitar una biopsia de piel para diferenciarla de otras afecciones relacionadas con la pigmentación como el melasma, la pitiriasis versicolor hiperpigmentada o las micosis fungoides hiperpigmentadas.

Lo primero para combatirla es eliminar aquellos factores que están causando esa inflamación. Así, en el caso de una PIH por acné, será fundamental acabar primero con el brote y regular la inflamación general de la piel; antes de pasar a tratar la mancha propiamente dicha.

Dado que la luz solar puede agravar las manchas, los profesionales de la estética recomiendan protegerse de la exposición solar con un SPF de amplio espectro; es posible que según el caso el dermatólogo recomiende uno que además incluya zinc y dióxido de titanio en su composición para controlar el blanqueamiento de la mancha.

En este sentido, las cremas blanqueadoras pueden adquirirse en las farmacias, pero actualmente hay un debate intenso sobre su venta sin prescripción. De hecho, la hidroquinona está prohibida para su uso en cosméticos sin receta en Europa y la FDA está valorando su retirada del mercado, directamente.

Por ello, siempre es importante contar con la prescripción de un profesional que pueda valorar tanto la afección como nuestros hábitos; de cara a evitar malas aplicaciones en casa que lleguen a complicar la mancha. En cuanto a los tratamientos médicos, puedes encontrar tratamientos como el láser y las terapias intensas de luz pulsada (LPI) específicas para manchas.