Signos y tratamiento: hiperpigmentación causada por inflamación
Las manchas en la piel pueden tener distintos orígenes y es importante conocer las causas para tratarlas correctamente y, sobre todo, para aprender a proteger la piel allí donde somos más sensibles para mantener la hiperpigmentación bajo control.
Dentro de los distintos tipos de manchas, encontramos aquellas que se engloban dentro del concepto hiperpigmentación postinflamatoria que, como su propio nombre indica, es una hiperpigmentación causada por una inflamación y puede afectar no solo al rostro, sino también al cuerpo.
Cuando una lesión, erupción, mancha o cualquier proceso causa inflamación en la piel, la propia inflamación provoca que los melanocitos, células productoras de la melanina que da color y tono a nuestra piel, ojos y cabello, liberen melanosomas en exceso. Por entender la parte técnica, estos melanosomas contienen tirosinasa, una enzima de pigmentación que inicia la producción de melanina y la sintetizan. De este modo, el exceso de células de pigmentación oscurecen y cambian el color de la zona donde había esa lesión por inflamación.
Su nombre viene dado porque parece habitualmente como respuesta a una inflamación (como puede ser el acné, la dermatitis atópica o la psoriasis) o a una lesión (como puede ser la desencadenada por un tratamiento agresivo de dermoabrasión, exfoliaciones químicas profundas o laserterapia sin seguir las pautas de protección posteriores al tratamiento). De hecho, el acné es la causa más común de los pacientes que sufren la hiperpigmentación postinflamatoria, seguido de los tratamientos estéticos agresivos sin un buen control posterior.
En cuanto al tipo de piel, las pieles oscuras tienden a sufrir más fácilmente este tipo de alteración en la melanina y, lejos de lo que se creía hace unos años, este tipo de manchas causadas por inflamación afecta de igual modo a hombres y las mujeres.
En el caso de las manchas generadas por inflamación, encontramos tonos muy variados: de rosa a rojo, parda o negra, en función del tono de la piel de la persona y de la profundidad del cambio de coloración; grosso modo a mayor inflamación y lesión, la mancha será más apreciable.
También pueden ser pequeñas marcas o similares a las pechas, así como de mayor tamaño y más oscuras según el grado de la afección. Por ejemplo, la mancha que nace tras un granito inflamado apenas será apreciable, mientras que las manchas por un brote agresivo serán más oscuras y grandes en base a la afección o lesión sufrida por el brote acnéico.
Habitualmente es un tipo de hiperpigmentación que va desapareciendo con el paso del tiempo desde que se cura la lesión que ha provocado la inflamación y la mancha. Si bien los tiempos de recuperación son variables, en promedio pueden transcurrir entre 3 y 24 meses antes de que las zonas oscurecidas se resuelvan. Sin embargo, en algunos casos este tiempo puede ser superior. El tiempo depende de la diferencia en el tono cutáneo entre el tono cutáneo natural y las marcas oscurecidas: cuanto más importante sea la diferencia, tanto más tiempo transcurrirá para que los tonos se reequilibren.
A la hora de tratar la hiperpigmentación post-inflamatoria, los expertos coinciden en que es importante la combinación de tratamientos y acciones para recudir su presencia en la piel lo antes posible. Por un lado, el proceso se inciaría como en otros casos de hiperpigmentación, con un tratamiento que permita unificar el tono de la piel como la láserterapia o la exfoliación química.
Este tratamiento es aconsejable acompañarlo de otras acciones que ayuden a regular la actividad de los melanocitos en la zona afectada que normalmente se basa en medicamentos prescritos por un profesional para inhibir la producción de melanina y mejorar la uniformidad del tono cutáneo, aclarando las manchas más oscuras de manera que se equiparen a la pigmentación normal de la piel.
Algunos ejemplos de estos productos de uso tópico suelen ser aquellos que contienen activos como arbutina (componente fundamental en numerosos productos blanqueadores de la piel asiáticos y una fuente natural de hidroquinona). También se ha confirmado que derivados de vitamina C combinados con otros activos son bastante eficaces frente a la hiperpigmentación postinflamatoria, así como el ácido kójico o el glicólico.