Tejidos: ¿Qué ropa es adecuada para la piel sensible?
La pieles sensibles requieren mimos especiales en el día y en el caso de la ropa no es para menos. Tener en cuenta los tejidos a la hora de comprar las prendas será fundamental para asegurar un uso cómodo que no cause irritaciones o brotes de distintos tipo, como en el caso de la dermatitis atópica. La ropa para pieles reactivas suelen utilizar tejidos no agresivos con la piel; así, respetan su sensibilidad y, de hecho, también son muy adecuados en situaciones especiales, como en brotes causados por alergias.
Dentro de la ropa para piel sensible, los tejidos naturales suelen ser una opción acertada; normalmente las que se componen de fibras de plantas y animales, como la lana de cachemire, el algodón, el lino, la franela, el cuero o la seda. Se trata de prendas con una alta transpiración de forma que no contribuyen a la oclusión de la piel.
Hoy en día, existen algunos tejidos orgánicos especializados en pieles sensibles; especialmente en el caso del algodón orgánico con certificado GOTS (un certificado de productos textiles ecológicos). No en vano, por desgracia cada día más pieles presentan sensibilidad, alergias o reacciones de diversos tipos.
En ocasiones, elegir una tela adecuada puede no ser suficiente a la hora de elegir ropa para las personas con piel sensible. La tintas y los accesorios que se incluyen en la prenda (como botones o cremalleras) también pueden se menos adecuadas en el caso de contacto con pieles específicas. Por ello, en el caso de sufrir esta condición es interesante seguir firmas que ya hayas probado y puedas confiar en sus tejidos; especialmente en el caso de sensibilidad causadas por alergias.
Dentro de la ropa para piel sensible, sobre todo se deben evitar telas sintéticas. Se trata de tejidos que no permiten que la piel respire tanto como en el caso de los tejidos naturales, pudiendo agravar las afecciones. Por otro lado, suelen contener más componentes potencialmente reactivos para la piel.
Además, las telas sintéticas contienen componentes o manufacturas que utilizan productos agresivos con la piel y que, incluso, pueden llegar a se peligrosas para el organismo como derivados de petróleo, metales o químicos poco recomendables. Así, nylon, viscosa, lycra o poliéster no serán buenas opciones en el caso de una piel muy sensibilizada.
En ocasiones, los materiales peligrosos son utilizados tanto como parte de los tejidos como durante la fase de fabricación; como en el caso de los desgastados en los vaqueros por sandblasting que tanto escándalo formó hace unos años porque era altamente peligroso para los que realizan el proceso de desgastado en las fábricas.
Para finalizar, debemos recordar que la prenda no es solo aquella que sacamos de la tienda. Muchas veces estropeamos los tejidos por un lavado no adecuado; incluso el uso de productos de limpieza para la ropa demasiado agresivos puede provocar reacciones alérgicas o brotes en las pieles más sensibles.