Aprende a hacer una pedicura en casa
Hace algún tiempo, repasamos algunos tips para tener unos pies perfectos, hoy vamos a centrarnos en cómo hacernos una pedicura en casa, algo muy recomendable para nuestros pies. Realiza esta rutina una vez cada 15 días o una vez al mes y mantén buena hidratación e higiene a diario. Notarás cómo tus pies mejoran poco a poco.
1. Elimina impurezas. Vamos a mimar nuestros pies, así que empezaremos por limpiarlos cuidadosamente. Retira el esmalte de uñas si lo llevas. Es preferible utilizar un quitaesmaltes sin acetona para evitar resecar la uña y la cutícula.
2. Masajea ligeramente los pies. Vamos a intentar relajarnos, nada como unos toques para ir allanando el terreno. Masajea las plantas de los pies presionando con los pulgares en movimientos circulares. A continuación, estira los dedos de los pies con suavidad, intentando estirarlos y aliviar la tensión acumulada. [cryout-pullquote align=»right» textalign=»left|center|right» width=»33%»]No dejes de acudir a un experto si tienes problemas en los pies, son quienes mejor podrán ayudarte.[/cryout-pullquote]
3. Pon los pies a remojo. Agua caliente o tibia, depende lo que quieras conseguir. Como estoy orientando todo a la relajación prueba con agua caliente y un poco de sal gorda. También puedes añadir unas gotas de algún aceite de aromaterapia que te guste. Con 5-10 minutos será suficiente.
4. Exfolia tus pies. Eliminarás la piel seca y muerta. Realízalo con movimientos circulares y aclara con abundante agua después para que no queden restos. Ayúdate de una lima para pies o una piedra pómez para las zonas más duras o callosas (raspa con suavidad).
5. Retira las cutículas. Hay quien prefiere simplemente empujarlas hacia atrás con un palito de naranja (no te pases empujando), otros prefieren cortar lo que retiran, pero yo soy partidaria de la primera opción y, de hecho, muchas veces me salto este punto. Ten en cuenta que la cutícula está ahí para evitar infecciones. Los expertos también recomiendan aplicar algún aceite para hidratar las cutículas de tus pies y evitar la típica piel dura.
6. Corta y lima las uñas de los pies. Recuerda hacer el corte recto para evitar que se clave en la carne, si quieres darle una forma redondeada en las puntas ayúdate de una lima.
7. Hidrata tus pies con una crema especialmente pensada para ellos. Hazlo con un suave masaje para que sea más placentero.
8. Aplica esmalte de uñas si te apetece. Puedes utilizar una lima pulidora para dar un acabado brillante natural a tus uñas sin esmaltes adicionales.
– Si necesitas un tratamiento específico para algún problema específico ponte en contacto