Los secretos de la Nutrición celular
Las células necesitan alimentarse de nutrientes para conseguir realizar sus funciones de forma equilibrada y correcta. A través de la nutrición celular, las células se enriquecen de sustancias y energía que les permiten desarrollar su ciclo vital de forma adecuada.
En un mundo donde la alimentación se ve cada día más deteriorada respecto a la calidad de nutrientes que ingerimos, es lógico que proliferen productos que ayuden a soportar una correcta nutrición celular. Por ello, cada día ganan mayor popularidad marcas como fitline dedicadas a elaborar productos que mejoran y optimizan los nutrientes que se consumen.
Como indican desde la empresa especializada en nutrición, Nutricelu:
Los productos fitline funcionan y son diferentes gracias al NTC (concepto de transporte de nutrientes) todos los nutrientes son distribuidos por el riego sanguíneo en minutos a nivel celular. […] Podemos tener una mejor calidad de vida y mejorar nuestro sistema inmunológico sobre todo lo que destaca es un aumento del nivel de energía, mayor concentración, regenerador del sueño y aumento de nuestras defensas.
¿Qué es la nutrición celular?
La nutrición celular es un sistema que incluye distintos procesos que permiten a las células obtener la materia y la energía que necesitan para realizar sus funciones vitales. El primer proceso se inicia con el consumo de alimentos que, gracias al sistema digestivo, se descomponen en nutrientes más sencillos de asimilar por las células; como la glucosa o los aminoácidos.
Los nutrientes llegan a las células mediante el torrente sanguíneo combinado con la acción del sistema nervioso. De la sangre pasa al líquido intercelular, donde, por fin, queda disponible para ser utilizado por las células.
Los animales y los seres humanos son heterótrofos, lo que significa que necesitan satisfacer la nutrición celular usando la materia de otros seres vivos, ya que son incapaces de sintetizarla para alimentarse. Por entender la diferencia, las plantas serían seres vivos autótrofos con la capacidad de producir sus propios alimentos, porque pueden fabricar o sintetizar alimentos a partir de compuestos orgánicos con ayuda de la energía solar.
¿Qué nutrición celular necesitamos?
Una buena nutrición celular debe incorporar distintos tipos de sustancias para asegurar la correcta función vital. Una dieta equilibrada no debe tener en cuenta solo las calorías ingeridas, sino que estas sean de calidad para que todas las funciones vitales se realicen de forma adecuada.
Debemos preocuparnos por incluir todos los nutrientes necesarios para el organismo como pueden ser los siguientes:
- Proteínas. Se descomponen en aminoácidos que se asocian a moléculas encargadas de la defensa, transporte o regulación de las funciones o de los tejidos.
- Hidratos de carbono o carbohidratos. Se trata de glúcidos o azúcares que suponen la principal fuente de energía dentro del organismo. Existen distintos tipos como monosacáridos (como la fructosa de la fruta y la glucosa o la de la miel), bisacáridos (como la lactosa de la leche o la sacarosa del azúcar) o polisacáridos (presente en cereales y legumbres).
- Grasas o lípidos. Son una reserva energética, ayudan a mantener la temperatura corporal y protegen los órganos vitales. Existen tres tipos principales: saturadas (animales), insaturadas (aceites vegetales) o trans (insaturadas con hidrogenación, que las convierte, al final, en saturadas).
- Vitaminas. Básicas para las reacciones metabólicas. Existen hidrosolubles (vitamina C, las del grupo B que se eliminan fácilmente requieren ingesta diaria) y liposolubles (como las vitaminas A, D y E que se acumulan en el organismo y no son fáciles de eliminar).
- Minerales. Colaboran en distintos procesos fisiológicos y que suelen encontrarse en semillas, algas, cereales, legumbres o verduras. Algunas las necesitamos en mayor cantidad, como los macrominerales (potasio, calcio, sodio, magnesio, fósforo, cloro, azufre,…) y otros en menor cantidad, como los oligoelementos (hierro, yodo, flúor, cobalto, manganeso, zinc,…).