¿Cómo mejorar la eficiencia energética de tu hogar y reducir las facturas?
En un año en el que hemos visto récords históricos en el precio de la luz, ahorrar en las facturas de suministros es clave para conseguir estar a gusto en casa controlando el gasto de las facturas. Anticipar y entender cuáles son tus necesidades reales de consumo te ayudará a tomar decisiones inteligentes que te permitan reducir tus costes básicos.
En cualquier caso, debes tener en cuenta que los costes fijos de la factura solo se pueden reducir negociando directamente con la compañía. Para ahorrar en las facturas de luz, agua y gas, es importante dedicar unos minutos a planificar el consumo, revisar tus facturas y plantear las mejoras posibles en el hogar para conseguir un consumo más eficiente que se traduzca en una menor factura.
Decoración y factura de la luz
No todos podemos permitirnos instalar placas solares en nuestro hogar, pero, por absurdo que parezca, la decoración del hogar puede ser clave a la hora de reducir las facturas de suministros de nuestro hogar. Trucos como aprovechar al máximo la luz natural con cortinas que permitan pasar la claridad pueden ser claves para el ahorro energético durante el día. No en vano, el precio de la electricidad en España es de los más altos de Europa.
Del mismo modo, recurrir a paredes en tonos claros puede contribuir para conseguir que la luz se expanda mejor por los espacios y, así, se requiera recurrir menos a la luz artificial que siempre tiene un coste. Igualmente, los muebles claros ayudarán a dar la sensación de frescor y amplitud.
Si el objetivo es mejorar la luz natural de un espacio, también se puede recurrir al uso de espejos para que la claridad vaya más allá, especialmente en lugares con poca luz como los típicos pasillos de las casas.
Para mantener el calor, los expertos recomiendan recurrir a las alfombras que actúan como aislantes térmicos en el suelo, aunque requieren un buen mantenimiento de limpieza. Se pueden combinar con suelos frescos de terrazo para potenciar el frescor o el calor según la época del año; aunque los suelos de madera suelen ser buena opción durante todo el año.
Controlar el consumo para ahorrar en la factura
Dentro del consumo de la luz, puedes optar por utilizar sistemas de detección automática para que solo se encienda la luz cuando es necesario o introducir sistemas reguladores de potencia para regular también el consumo. Esto mismo puede aplicarse a sistemas como la calefacción o el aire acondicionado, con programadores y reguladores; para conseguir que la temperatura sea siempre agradable o que se encienda y apague cuando realmente es necesario.
Para ahorrar dentro del consumo de la calefacción existen alternativas a la calefacción eléctrica o de gas algo más económicas para calentar grandes estancias, como estufas independientes de gas con termostato regulable o las estufas de pellets, que utilizan pellets de madera prensada. Respecto a las altas temperaturas, se puede intentar dispersar el calor con ventiladores que mantienen menor gasto y recurrir a nuestros consejos para combatir el calor en el hogar.
Hoy en día, también es importante intentar organizarse para reducir el consumo durante las horas punta e intentar utilizar la plancha, el lavavajillas o la lavadora en las horas valle, como los fines de semana. En este sentido, también se recomienda apagar los elementos que estén en stand by (con la típica lucecita encendida); en lugar de realmente apagados que es cundo dejan de consumir.
Consejos para ahorrar en la factura del agua
La factura del agua también es importante, no solo por consumo, sino también por responsabilidad. Para que te hagas una idea, si una ducha puede gastar entre 50 y 100 litros de agua, una bañera puede derrochar más de 200 litros de agua al llenarse. El uso racional del agua permite evitar el derroche, aunque hay momentos en los que realmente un par de minutos más en la ducha o un baño caliente pueden ayudarnos a sobrellevar mejor la carga del día.
Si ya has aprendido a controlar estos impulsos, también hay otras cosas que puedes hacer para optimizar el consumo de agua. Por ejemplo, los reductores de caudal permiten reducir el caudal de agua o los aireadores que mezclan el chorro de agua con aire al salir del grifo. Con ambos sistemas, se puede llegar a reducir más de un 50% la factura de agua.
Revisar la fontanería de la casa para evitar pérdidas de agua también puede ayudar a reducir la factura y conseguir evitar averías mayores que acaben en un coste adicional. Según cómo sea el espacio disponible, incluso puedes incluir elementos de reciclado de agua, como aquellos que recogen el agua de las bajantes pluviales o los sistemas que reciclan las aguas grises (utilizadas) con un filtrado, decantando y oxigenando, para volver a utilizarla en riego o cisternas.
Mantenimiento y mejoras de eficiencia
Mantener tu casa a punto es importante para conseguir un consumo energético menor. Algunos aparatos o elementos con mal funcionamiento u optimización pueden acabar haciéndonos consumir más para cubrir una necesidad.
A la hora de ir renovando aparatos con consumo eléctrico, no olvides chequear cuál es su etiqueta de eficiencia energética del producto. Los electrodomésticos de serie A o superior tienen mejor rendimiento ofrecen y un consumo más sostenible que ayuda a ahorrar en la factura.
Para ahorrar en las facturas y salvaguardar el calor es fundamental contar con un aislamiento adecuado. Por ello, es importante revisar los lugares por los que el calor y el frío pueden escapar con mayor facilidad para intentar reducirlos o suprimirlos. Algunos elementos que no debes olvidar revisar son: puertas, ventanas, con sus marcos y molduras, cajetines de persianas, chimeneas, etc.