Review: Revlon Nutri Color 200 (Violeta)
Hace poco causé un simpático revuelo en las redes debido a unas mechas con un estilo a caballo entre las californianas y las velo en un tono violáceo. Llevo con ellas todo el verano, pero como no me decoloré el cabello prácticamente solo se ven con el sol (digamos que tengo el mismo tono, pero en distinto pigmento). El problema de este tipo de tintes tan agresivos es que pierden color con demasiada facilidad, por lo que se hace imprescindible cuidarlo para mantener su viveza y color.
Hoy voy a hablaros de la mascarilla Nutri Color 200 (color violeta-morado intenso) de Revlon, mi gran aliada para conseguir mantener el color siempre en buenas condiciones. Está disponible en muchos más tonos y colores para que encuentres el adecuado al tu cabello.
Se trata de una mascarilla de coloración de cabello instantánea con un tratamiento nutritivo, eso sí aplícalo con guantes porque sino no hay quien quite el color donde te hayas manchado. De hecho, como primer consejo deja a mano un algodón y un bote de lejía para quitar rápidamente donde caiga porque sino se queda la mancha.
El producto es un concentrado de pigmentos iónicos, lo que viene a ser una «Interacción de pigmentos electroestáticos inmediatos con la fibra de cabello coloreada […] Con ácidos de fruta AHA Propiedades hidratantes, suavizantes, nutritivas y desenredantes sin que tu cabello pierda volumen. Sin amoniaco – NH3 – Sin peróxido- H202, pH ácido (4,5 – 5): respeto total por la integridad del cabello», como explica la propia marca.
En cuanto al olor tiene un aroma suave y afrutado bastante agradable, especialmente para las que repelemos el olor tradicional del tinte. En cuanto al resultado, hablando de levantar el color, no puedo estar más contenta: recuperación del color con su brillo y muy natural.
El único inconveniente que le veo es que mancha bastante, especialmente los dos primeros días tras su aplicación, por lo que debes evitar camisetas de colores claros. En el caso del verano ha sido un poco odisea porque no podía pisar la piscina los primeros días tras su uso y, al ser una mascarilla, evidentemente su duración tampoco es tan prolongada como la de un tinte permanente común por lo que recomiendo repetir su aplicación cada dos semanas aproximadamente. Como es muy nutritivo el pelo se queda bastante suave y no es tan agresivo como si te estuvieses dando el tinte cada mes, en mi caso que soy castaña me aguanta perfectamente.
Os dejo algunas imágenes para que veáis como varía según la luz y el tiempo de aplicación (puedes ver más en Instagram):
En esta primera imagen el producto está recién aplicado. He de confesar que lo dejo algo más tiempo del que indican en la caja, me doy una ducha, lo aplico, me pongo a hacer cosas y al ratito me lo quito. Como ves, al estar el día ligeramente nublado apenas se aprecia el color morado en las puntas de mi cabello. Algo muy distinto a lo que ocurre en esta segunda imagen:
Aquí la mascarilla llevaba sin aplicarla como 3 o 4 semanas debido a que, como dije, prefiero no utilizarlo si sé que voy a ir a la piscina o a la playa. Como veis se aprecia bastante la pérdida de color y de brillo, pero tras una nueva aplicación de producto tras la vuelta de vacaciones está de nuevo como en la primera imagen.
En mi caso se nota mucho más porque el pelo ya estaba teñido de antes, pero si lo que buscas son pequeños matices de color sobre tu color seguro que te gusta el resultado, especialmente en cabellos castaños o morenos.