¿Cómo funcionan los nutricosméticos antiedad?
Los nutricosméticos son complementos alimenticios que funcionan desde el interior del organismo para llegar a las capas más profundas de la piel y así mejorar la belleza cutánea y evitar las arrugas y otros signos de envejecimiento.
¿Qué son los nutricosméticos?
Los nutricosméticos son complementos alimenticios cuyos principios activos actúan directamente sobre la piel y el cabello desde el interior. A diferencia de las cremas u otros productos estéticos que se aplican sobre la piel o el cabello, los nutricosméticos liberan en nuestro organismo una serie de principios activos que, una vez absorbidos por el cuerpo, llegan a las capas más profundas de la piel actuando contra los procesos intrínsecos del envejecimiento de la piel, convirtiéndose en un muy efectivo tratamiento antiarrugas.
¿Por qué es efectiva la nutricosmética?
La piel es uno de los órganos más importantes de nuestro organismo que cumple muchas funciones como producir algunas hormonas y vitaminas, ayudar a regular el sistema inmune, regular la homeostasis local y sistémica, actuar como una barrera contra las agresiones externas.
Por todo ello, también es uno de los órganos que más sufre las agresiones externas como la exposición a los rayos ultravioleta, la contaminación, los cambios bruscos de temperatura… lo que se refleja externamente en la aparición de manchas, arrugas, flacidez, rojeces, etc.
Una dieta pobre en vitaminas y minerales, la falta de sueño, el estrés o el tabaquismo son otros factores que afectan a la salud de nuestra piel.
Además, la piel, como el resto de nuestros órganos, sufre los cambios internos propios del envejecimiento causados por mecanismos como el daño mitocondrial, el daño oxidativo, la inestabilidad genómica, etc.
Las cremas, sérum o cosméticos antiedad pueden ofrecer soluciones a corto plazo, pero dejan de actuar en cuanto dejamos de usarlas y, además, no son tan efectivas como los nutricosméticos ya que estos actúan sobre estas causas de envejecimiento al trabajar desde el interior, protegiendo nuestra piel desde dentro y manteniendo la integridad y reparación de la piel a nivel celular, no solo a nivel superficial.
En resumen, los nutricosméticos ofrecen una solución a las arrugas y otros signos de envejecimiento de la piel a largo plazo y mucho más efectiva al trabajar sobre las células que forman la piel, ayudando a fabricar los componentes que la mantienen joven y bella. Así, se trata de un excelente recurso antienvenjecimiento a tener en cuenta.
¿Qué principios activos son esenciales en un buen nutricosmético?
- Licopeno: es un pigmento orgánico de color rojo que se encuentra en algunas frutas y verduras llamado carotenoide que tiene propiedades antioxidantes que protegen la piel del daño causado por los radicales libres, que provocan la oxidación y la aparición de las arrugas o la flacidez de la piel al envejecer. Además, protege de los rayos ultravioleta.
- Isoflavonas: favorecen un mejor depósito y remodelación de colágeno, previenen la oxidación lipídica y mejoran el funcionamiento reparador de fibroblastos.
- Vitamina C: la piel contiene altas concentraciones de vitamina C, estimulando la síntesis de colágeno y la protección antioxidante contra el daño solar.
- Ácido hialurónico: es una molécula muy larga a la que se pueden unir otros componentes de la piel, como GAG (glicosaminoglicanos), colágeno y elastina, por lo que ofrece muchos beneficios a la piel como ayudar en la cicatrización y regeneración de tejidos, así como funciones antiinflamatorias e inmunomoduladoras. Es uno de los componentes esenciales de la piel, donde se une al agua para retener la humedad y evitar la sequedad, la flacidez, las arrugas.
- Colágeno: el colágeno es una proteína, el principal componente estructural de la piel que se reduce al envejecer, reduciendo la elasticidad de la piel. Suministrar más colágeno al organismo evita la pérdida de elasticidad, firmeza y la aparición de las arrugas.
- Coenzima Q10: molécula involucrada en el metabolismo mitocondrial (producción de energía de las células) y el sistema antioxidante endógeno. Las concentraciones de CoQ10 en la piel disminuyen con la edad y la exposición a radiación UV. Suministrar coenzima Q10 permite revertir los signos de envejecimiento.
- Condroitín sulfato: glucosaminoglicano involucrado en mantener la matriz extracelular e inducir la expresión de colágeno, por lo que evita las arrugas, la descamación o la pérdida de firmeza.
- Polypodyum leucotomos: el extracto natural de esta planta tiene importantes efectos protectores contra la radiación UV, mediante función antioxidante e antinflamatoria. Además, combate los radicales libres que dañan la piel.
- Vitamina E (alfa tocoferol): la vitamina E tiene un alto poder antioxidante. El alfa tocoferol es la forma de esta vitamina más abundante en la piel, ayudando a mantener el colágeno.
- Biotina: la biotina es una vitamina del grupo B (B7), que se encuentra en altas concentraciones en la piel, por lo que es fundamental para tener una piel sana.
- Selenio, zinc y cobre (13): estos micronutrientes esenciales tienen importantes funciones en prevenir el envejecimiento de la piel, especialmente cuando existe un déficit. El selenio es antioxidante y forma parte de enzimas como el glutatión. El zinc está involucrado en la función de más de 100 enzimas, incluyendo reacciones redox, función cerebral y sistema inmune, y su suplementación se ha evaluado para el tratamiento del acné, rosácea y psoriasis. El cobre es un mineral que también actúa como cofactor de reacciones redox y debe encontrarse en cantidad adecuada para favorecer el cuidado de la piel.
- Arándanos: aporta grandes cantidades de vitamina C, fibra y compuestos fenólicos (antioxidantes) que luchan contra los radicales libres en las células. Asimismo, sus antocianinas ayudan a reducir la degradación del colágeno, evitando el envejecimiento de la piel.
Todos estos compuestos actúan desde el interior de la piel para protegerla contra los daños externos y los desequilibrios causados por el envejecimiento, manteniendo una piel más joven durante más tiempo.
Fuentes: Chung JH, Hanft VN, et al. “Aging and photoaging.” J Am Acad Dermatol. 2003 Oct;49(4):690-7. Jin R, Luo L, Zheng JJL. The Trinity of Skin: Skin Homeostasis as a Neuro–Endocrine–Immune Organ. 2022;12(5):725. Teo CWL, Tay SHY, Tey HL, Ung YW, Yap WN. Vitamin E in Atopic Dermatitis: From Preclinical to Clinical Studies. Dermatology. 2021;237(4):553-564. doi: 10.1159/000510653. Actiage, www.actiage.com Academia Española de Dermatología y Venereología American Academy of Dermatology