Ahorrar dinero: tips para que el día día no sea tan cuesta arriba
Los españoles ahorran poco. Los datos son claros, más de la mitad no consigue ni juntar 50 euros al final de cada mes y quienes lo consiguen no suelen superar los 200 euros y en realidad no es de extrañar. Con sueldos en torno a los mil euros y unos gastos fijos excesivamente altos para las necesidades básicas como el agua, la luz, el aquiler o la hipoteca, parece lógico que no nos quede demasiado margen para nada, ni para ocio ni para ahorro.
El problema no es que no quieran ahorrar, si no que no saben cómo ahorrar de forma efectiva y sin esfuerzo. Un típico ejemplo lo encontramos en las ofertas de 3×2 que muchas veces compramos pensando que la unidad nos sale más barato y, sin embargo, no es ahorro ninguno si las cantidades son excesivas para tu núcleo familiar. Gastar de forma inteligente, preveer gastos y controlar los resultados son los tres consejos básicos que todo el mundo te dará y a priori parecen obvios, pero si se queda ahí, probablemente sigas cayendo en los mismo errores una y otra vez.
En realidad, cuando pensamos en el ahorro, a menudo lo asociamos con grandes esfuerzos en el día a día, pero la realidad es que ahorrar no tiene porqué suponer pasar calamidades, con un simple cambio de actitud puedes empezar a ahorrar en tu día a día sin realizar ningún tipo de esfuerzo y sin quitarte de nada. ¿Quieres conocer nuestros trucos mentales para resistirnos a gastar más de la cuenta? Toma nota y notarás los resultados.
En primer lugar, evita los estímulos. Cuando vamos a un supermercado todo está perfectamente pensado para alimentar nuestro ego consumista, intenta evitar estos estímulos. Uno dirá, muy bien, yo ya hago mi lista de la compra y procuro no salirme de ella, pero la realidad es que siempre cae algo con lo que no contabas o te quedas con algo de ansiedad por no haber podido comprar todo lo que querías.
Un buen truco recomendado por los expertos, más allá de ir a comprar sin hambre, es marticar chicle y llevar auriculares con música cuando vayas de compras. ¿Para qué y por qué? Con el chicle evitarás los olores estratégicamente colocados y al quitar la sensación de hambre evitarás tirarte encima de todo lo que tenga buena pinta; por su parte, la música te hará desconectar de los estímulos exteriores.
Otro buen consejo es ponerse objetivos. Tener un objetivo a medio y largo plazo te ayudará a controlar tus instintos a corto plazo y controlar un poco más el dinero que gastas al mes. Los caprichos no son malos en sí mismos, son malos cuando no los merecemos o dejamos de lado algo importante. Pueden ser de todo tipo: un fin de semana fuera, un filete de primera calidad para darte un homenaje,etc. adapta tus objetivos a tu frma de vida y necesidades y, por supuesto, sé realista.
Debes controlar lo que gastas, lo que ingresas, lo que te sobra y qué haces con ello. Particularmente, para motivarme a no gastar en exceso durante el mes, lo que me sobra a fin de mes lo divido de tal forma que una parte es para ahorro y la otra para gastarlo en mí, bien sea en salir con amigos o en darme algún capricho. Si un mes me he pasado, sé que el sobrante no lo puedo tocar, así que me ayuda a organiarme en el día a día. Eso sí es importante: los caprichos y excesos déjalos apra final de mes, cuando ya tienes claro con lo que cuentas y las previsiones del mes siguiente.
Otro truco para controlar el gastos es hacer una funda para las tarjetas de crédito con una foto de tu presupuesto y límite financiero, igual que harías para motivarte con una dieta. Como explica Simple Dollar, te puede ayudar a recordar las limitaciones cada vez que abras la cartera para pagar con la tarjeta. También puedes fiajrte máximas, siempre y cuando realmente vayas a seguirlas, del tipo: solo compro ropa en rebajas si es para darme un capricho (y, aún así, en estos casos, establece un presupuesto previo antes de pasarte por el centro comercial).
También hay expertos que recomiendan hacer las valoraciones sobre lo que cuestan las cosas de un modo algo diferente al que estamos acostumbrados. ¿Todavía eres de las que se escandalizan al pensar lo que algo le habría costado en pesetas? La peseta desapareció y los niveles de vida cambian, no podemos comprarnos con eso eternamente. Ahora bien, ¿has pensado cuántas horas de trabajo te suponen? Ponte el precio por hora y calcula si lo que vas a comprar merece realmente las horas de trabajo que necesitas echar para comprarlas.
Por último, un buen truco para conseguir ahorrar sin que te cueste mucho es procurar llevar billetes grandes en la cartera que a menudo te dará perea cambiar para compras pequeñas. Del mismo modo, cuando tengas billetes de 5€ puedes directamente quitártelos de encima y meterlos en una hucha. Notarás la diferencia.