Cuida tu piel después del verano
Los días son sensiblemente más cortos, en breve se acaban las largas exposiciones al sol veraniego y los bañadores quedarán relegados a los fondos más oscuros de nuestro armario. Durante el verano, las agresiones externas son muy fuertes, el sol y el cloro llegan combinadas con el maltrato y los descuidos sobre el cuidado habitual que damos a la piel. La deshidratación es uno de los problemas más comunes a la vuelta de vacaciones, seguido de las manchas solares por la alta exposición solar, por lo que debemos tenerlo en cuenta a la hora de seleccionar los tratamientos a aplicar en este periodo. Ahora es el momento de cuidar tu piel y ponerla a punto, pero… ¿sabes cómo?
En primer lugar, vuelve a la rutina. Reserva 10 minutos por la mañana y 10 por la noche para tu rutina de limpieza facial. La higiene y la hidratación van a ser imprescindibles en este periodo de recuperación de la piel para prolongar el moreno y evitar la aparición de nuevas arrugas. La crema Suave Desmaquillante de Clarins, por ejemplo, permite recuperar la pureza, la luminosidad y la belleza.
Además, la hidratación evitará descamaciones y te ayudará a fijar el bronceado para hacerlo más duradero. También puedes tomar complementos nutricionales con betacarotenos que potencian el tono bronceado de la piel, o alimentos que los incluyan como la papaya. Por otro lado, tienes productos específicos para este fin como el Bálsamo para después del sol de Clarins, por seguir con el ejemplo de la marca anterior, que podrás seguir usando durante algún tiempo tras la vuelta de las vacaciones hasta que sientas que tu piel se ha recompuesto por completo.
Por tanto, es básico que recuperes tu rutina habitual (y sino la tenías antes siempre es un buen momento para empezar) limpiando la piel por la mañana y por la noche. De día aplica una crema hidratante con algo de protección solar, puede que el sol ya no pegue tan fuerte, pero no debes olvidarte del daño que producen los rayos UVA y UV; por la noche utiliza una crema nutritiva para regenerar adecuada a tu tipo de piel.
Exfolia tu piel al menos una vez a la semana a menos que tengas una piel con tendencia acnéica en cuyo caso debes buscar un tratamiento de exfoliación adecuado a tu tipo de piel. Ayudarás a tu piel a eliminar las células muertas y a regenerarse más rápido. Es preferible realizar la exfoliación por la noche, pero, en cualquier caso, evita la exposición solar directa tras la misma. Puedes probar con el GENTLE CREAM EXFOLIANT de Skin Health System.
Como comentábamos al principio la radiación ultravioleta produce cambios acelerados en el envejecimiento de la piel y pueden producir manchas en la piel. Si en tu piel tienden a aparecer manchas solares es importante que busques un tratamiento adecuado para combatirlas como el Cofre Multi-Intensive para las pieles maduras o ciertos peelings químicos de los que puedes informarte en tu centro estético de confianza.
En cualquier caso, no empieces a exfoliar la piel o a aplicar tratamientos agresivos hasta que las posibles quemaduras de la piel se hayan ido.