Recuperando la piel tras la cuarentena
En plena fase de desescalada, volvemos a la calle con muchas ganas de disfrutar del sol y de la gente. Estos meses el cambio de hábitos repentino ha causado un cambio en nuestra piel. No en vano, la piel es el órgano más grande que poseemos los humanos, por lo que es lógico pensar que el cambio en el ritmo y condiciones de vida afecten al estado de la piel.
Mantener la rutina de limpieza diurna y nocturna, así como adaptar nuestra rutina de belleza, tanto diaria como semanal, será fundamental para recuperar toda la belleza y esplendor de tu rostro.
Consecuencias de la cuarentena en la piel
Si notas tu piel más apagada o falta de luminosidad, es normal debido a la falta de sol, al igual que hemos visto cómo la piel se sensibilizaba creando brotes de acné o una sensibilidad extra en la piel que ha podido derivar en problemas de rosácea. Esto se ve incrementado por el estrés que hemos sufrido estos días, en algunos casos por el miedo al contagio y por otro por la grave situación en la que la crisis ha dejado a muchos núcleos familiares.
Por otro lado, el exceso de higiene de estos días, con un uso excesivo del jabón, puede producir deshidratación y dermatitis por irritación, especialmente en las manos y en zonas de pliegues como alrededor de los ojos o las axilas. Aparte del abuso del jabón y de la limpieza, se debe también a un incremento de la sequedad, de forma que en estas zonas puede no secarse del todo al lavarnos, dejando restos de humedad o jabón que terminan por reducir aún más la cuota hídrica de la piel. En este sentido pueden aparecer descamaciones y rojeces en zonas más sensibles como los surcos nasogenianos o el citado contorno de ojos.
Un tip básico en este sentido es hidratar la piel tras lavarla siempre. De esta forma protegeremos la barrera natural de defensas, restaurando además de la hidratación la capa hidro-lipídica que permite retener la humedad en la piel.
El déficit de sol conlleva también una falta de vitamina D, por lo que es interesante incluir en la dieta alimentos ricos en vitamina D como salmón, atún, lácteos enteros o aguacates para compensar la falta de sol de estos días si eres de las que aún no sale mucho de casa. En cualquier caso, recuerda que bastan con 10-20 minutos diarios de sol para conseguir la Vitamina D que requiere el cuerpo; evita exponerte más de la cuenta con la estampida hacia la normalidad para evitar otros problemas como envejecimiento prematuro, manchas o, incluso, cáncer de piel.
Rutina de día vs. Rutina de Noche
Como verás, tu rutina de belleza post-cuarentena debe seguir los pasos habituales, lo que debes hacer es adaptar los productos a las nuevas necesidades de la piel y, sobre todo, reforzar las defensas de tu piel con activos protectores como la ectoína. Debes tener en cuenta la exposición a las agresiones que vas a tener.
Por ejemplo, durante la cuarentena hemos pasado mucho tiempo delante de pantallas de ordenador y móviles, lo que ha incrementado el deterioro generado por las luces HEV (ver qué son las HEV), pero previsiblemente ahora volvamos a tener que preocuparnos del sol.
Así, aportar antioxidantes como la vitamina C será fundamental para preparar la piel para la vuelta a la vida y es muy probable que puedas volver a utilizar los productos que usabas antes de la cuarentena si te has cuidado la piel adecuadamente durante el estado de alarma.
Durante el día, si sales a la calle no olvides la importancia del protector solar, incluso aunque utilices mascarilla. Te en cuenta que la piel debe volver a acostumbrarse a las agresiones externas y el sol es un aspecto crítico para la belleza de la piel. Durante la noche, además del plus nutritivo e hidratante, debes buscar productos que fomenten la formación de colágeno y elastina, como el retinol, para mejorar la elasticidad, textura y aspecto general de la piel.
Recupera tu piel con mascarillas y exfoliantes
Tras la cuarentena la piel necesita reforzar sus mecanismos de defensa naturales, así como aportar un impulso de belleza de forma que potenciemos la renovación y el estado saludable de la piel. Además de tu serum y crema habitual, es interesante incluir mascarillas y exfoliantes en tu rutina semanal para tratar cualquier afección nueva que hayas notado en estos meses.
Exfoliantes
Los exfoliantes te ayudarán a renovar la piel del rostro, mejorando luminosidad y eliminando esas células muertas que pueden obstruir el poro o potenciar la proliferación de bacterias que den lugar a otras afecciones como el acné. Una exfoliación una o dos veces por semana te ayudará también a que los activos de las cremas y mascarillas que apliques a cotinuación penetren mejor en la piel potenciando su eficacia.
Recuerda que debes elegir el exfoliante o peeling adecuado según las necesidades y tipo de tu piel. Sin embargo, podemos perdernos con la gran cantidad de opciones que ofrece el mercado: ¿es mejor el peeling químico o el encimático para ti? En este sentido os dejo una guía que hicimos hace tiempo sobre los tipos de exfoliantes más comunes que existen.
Mascarillas
Las mascarillas pueden ayudarte a tratar y solucionar muchas afecciones de la piel, por lo que es interesante incluirlas al menos una vez por semana de forma regular en nuestra rutina. En este periodo su uso también es imprescindible y deberás prestar atención para elegir la adecuada; de hecho, es probable que tengas que elegir una mascarilla u otra según el periodo y la evolución de tus afecciones faciales. Como hemos dicho, buscar un incremento de las defensas y equilibrar el sistema hídrico es fundamental para conseguir recuperar toda la belleza y juventud de tu rostro.