Cómo decorar tu casa para San Valentín
Se acerca la fecha más romántica del calendario. ¿Crees que ya no puedes sorprender de verdad a tu pareja? Hazle un regalo diferente, transforma tu casa en un escenario muy, muy íntimo y regálale una cena. No es tan difícil ni vas a tener que gastarte mucho. Y no, tampoco es necesario que llenarla de corazones si no te apetece. ¿Necesitas ideas? ¡Toma nota!
Preparando el terreno
Empezamos con la iluminación, la que va a crear ese ambiente cálido y envolvente que necesitas. ¿Cómo? Muy sencillo, baja las persianas y cubre las lámparas de pie y de mesa con una fina tela de gasa o de seda. Al difuminar la luz conseguirás una sensación de intimidad muy agradable.
No olvides las velas. En la entrada, en el salón, en el dormitorio, en el baño… puedes colocarlas donde quieras. Además, las hay en infinidad de formas y de colores, para que puedas jugar con ellas de manera diferente en cada rincón. Por cierto, mejor si son aromáticas, la ocasión es perfecta para jugar con todos los sentidos.
¿Y las flores? No, tampoco puedes olvidarlas. Repartidas aquí y allá siempre dan ese toque dulce y elegante que necesita cualquier encuentro romántico. Pero quizá busques algo un poco más sugerente que un sencillo bouquet. En ese caso, está claro: nada como unos pétalos de rosas rojas marcando el camino que quieras que siga tu pareja, o sobre la cama, o flotando en la bañera…
Momentos compartidos
Ahora que ya has creado un poquito de ambiente, llega el momento de vestir la mesa. Elige un mantel de tonos caros, una vajilla sencilla y dobla las servilletas de alguna forma artística. Si eres capaz de hacer un cisne ¡perfecto! Si no eres tan manitas, intenta hacer un corazón o una flor, no es complicado.
Falta la decoración, cómo no, con velas y flores. Combinar rojos y blancos quedará genial y con ese puntito atrevido que es imprescindible en el arte de la seducción. Si eres más tradicional, simplemente cambia el rojo por un rosa suave.
Y después de la cena, llega el momento de ponerse cómodos y, por supuesto, también hay que ambientar ese rinconcito. ¡Cuántos momentos íntimos se comparten en un sofá! ¿Verdad? Pues vístelo para la ocasión: llénalo de cojines y pon una manta calentita de punto grueso. Las hay muy bonitas y son perfectas para envolverse en ellas bien acurrucados.
Pequeños detalles que dicen mucho
Vamos ahora con detallitos muy, muy personales que no solo decoran, sino que llevan mensaje: una frase romántica en los posavasos o el servilletero, un ramito de lavanda sobre la almohada o unos botecitos de esencias junto a la bañera ya preparada… Ni lo dudes, ¡a tu pareja le va a encantar!
Y si ya lleváis un tiempo juntos, recuérdale lo mejor de esa vida en común. Rebusca en tus álbumes o imprime esas fotos guardadas en el móvil que te recuerdan de momentos especiales, compra unas guirnaldas de luces y cuelga las fotos de ellas con unas sencillas pizas. ¡Quedará un mural de lo más romántico! Será perfecto para dar la bienvenida a tu pareja o para adornar el cabecero de la habitación.
No hace falta que te lo digamos, ya sabes que si hablamos de romanticismo la puesta en escena es muy importante, pero a veces nos fallan las ideas. Ahora que ya has visto que puedes crear en casa un escenario perfecto para celebrar San Valentín, solo quedan dos cosas. Una: que te pongas ya manos a la obra. Y dos, la más importante: hacer de ese día otra fecha inolvidable para vosotros.
Fuente: habitissimo
Este texto ha sido realizado de forma íntegra por HABITISSIMO, colaboradores de El Rincón de Ika. Esta web no se responsabiliza de ninguna opinión o contenido vertido en sus textos o imágenes.