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Cuando pequeños detalles nos hacen la vida imposible y sentirnos incómodas todos los días es el momento de poner una solución. ¿Alguna vez has tenido zapatos donde se incrusta el olor y no hay forma de quitarlo hasta el punto de dejar de utilizarlos? Saber cómo quitar el mal olor de zapatos, chanclas, botas y botines es más fácil de lo que imaginas.
La excesiva sudoración descontrolada causada por los ritmos frenéticos que llevamos o el excesivo calor o el propio secado de los pies cuando uno se pone el calzado nada más salir de la ducha son algunos de los motivos por los que se produce el mal olor en los pies y en el calzado.
Piensa que unas botas no huelen mal por sí mismas, son las bacterias y residuos de nuestro propio pie los que lo generan, si a la mezcla añades unos calcetines húmedos te puedes imaginar que la mezcla se vuelve explosiva.
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Realmente da igual si el zapato es de buena o mala calidad, todos absorben el mal olor antes o después porque los residuos se van acumulando y la vida microscópica se abre camino, a veces, incluso, visible como en casos extremos donde llegan a aparecer hongos o a favorecer enfermedades de los pies.
En primer lugar, es tan importante eliminar el olor de ellos como encontrar las causas que lo provocan para conseguir atajar el problema de raíz, más allá de las soluciones rápidas que nos salvan el día a día y que, desde luego, también son importantes conocer. Puedes encontrarte con que el problema a atajar requiera atención combinada, con cuidados específicos tanto de zapatos como de tratamientos para pies.
En este sentido, debes tener en cuenta que cada problema tiene distinta solución. Por tanto, para eliminar el mal olor de los pies se debe utilizar productos y tratamientos concretos destinados para el cuidado y mal olor de pies, así como otro diferente especializado en eliminar el mal olor de los zapatos.
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Mantener una rutina de cuidado para tus pies, como una buena hidratación, higiene, exfoliaciones peródicas, etc. es básico, así como evitar la sudoración excesiva con talcos y calzado transpirable.
Si el mal olor no cesa, también puedes acudir a un especialista para que valore tu caso y determine el tratamiento adecuado a tus necesidades.
Por su parte, para eliminar el mal olor de los zapatos, se debe utilizar un desinfectante textil para este menester de modo que no solo se suprima el desagradable aroma, sino que, además, se cuide el calzado y se mantenga una higiene correcta para evitar que tu complemento favorito acabe pudriendo el material que lo compone o tu propio pie, abocado a caer en el olvido de la basura.
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No te olvides de que el calzado debe lavarse cada cierto tiempo y aplicar de vez en cuando los desinfectantes formulados para mantener en buen estado el interior del calzado.
Los expertos también recomiendan alternar cada día el calzado, por lo menos dos pares a la semana, para permitirle ventilar y seca bien para evitar la formación del mal olor, así como dejar a los pies respirar varias horas al día por lo menos, esto incluye quitarse los calcetines.
En resumen, evitar y eliminar el mal olor de los zapatos es bastante sencillo, basta con unas rutinas saludables que permitan mantener una buena higiene en pies y calzado para librarse de un pequeño, pero incómodo mal que, por desgracia, todos hemos sufrido en alguna ocasión.
