#MujeresconHistoria Frida Kahlo, el icono que rompió los prototipos
La mejicana Frida Kahlo es hoy en día un símbolo de la revolución femenina, un icono dentro de la moda que curiosamente en su momento rompió todos los cánones de belleza. De Stradivarius a Jean Paul Gaultier, pasando por John Galliano, Dolce & Gabbana, o Moschino (incluso Mattel sacó su propia versión)… todos han querido sumarse a lo que ella representa.
La pregunta de hoy es sencilla ¿por qué Frida Kahlo ha conseguido convertirse en un icono de la moda?
“Soy mi propia musa. Soy la persona que mejor conozco. Soy la persona que quiero mejorar”. Frida Kahlo
¿Quién es Frida Kahlo?
Como es costumbre, no entraremos demasiado en tediosos detalles autobiográficos, pero en el caso de Frida Kahlo es fundamental para comprender su trayectoria y crecimiento, dado que fue una mujer que se agarró a la vida por encima de todo.
La artista sufrió un accidente y una enfermedad que la dejó postrada en la cama durante un largo periodo con 18 años, lo que le llevó a iniciar aquellos famosos retratos de sí misma donde transmitía esa soledad y pasión que sentía allí postrada con un toque de intimismo, impresionismo y surrealismo tras sus pinceladas.
De hecho, la pintura siempre fue una válvula de escape para todas las tragedias de su vida, como la pérdida de varios hijos o una turbulenta relación matrimonial. Si algo puede decirse del paso de Frida Kahlo por el mundo y por el mundo del arte es que que colaboró en la ruptura de tabúes sobre la sexualidad femenina (no en vano se cuenta que ella era bisexual).
Gracias a una lucha y activismo constante se convirtió en un símbolo del feminismo y la moda. Demostró que la mujer no necesitaba estar supervisada por el hombre, ella misma era lo suficientemente fuerte, autosuficiente dentro de la adversidad y con esa combinación estética entre la colorida feminidad y los rasgos más varoniles.
El estilismo Frida Kahlo
Se ha debatido mucho sobre el peso de Frida Kahlo en la moda y sobre si su estilo se convirtió en un icono o si su personalidad ha servido de canal a grandes empresas y diseñadores para explotar su imagen feminista; incluso se han escritos libros como el de la autora española titulado «Frida Kahlo: Fashion as the art of being».
Sea como fuere, no creo que cuando una persona da sus primeros pasos tenga muy claro donde va a terminar, pero hoy en día su estética se ha convertido en todo un icono de la evolución femenina.
Su aspecto en algunos casos venía dado a modo de protesta social, como en el caso de su famoso bigote y la gran uniceja como protesta contra la sociedad machista que tenía a su alrededor; lejos de ser algo casual como se pudo comprobar posteriormente cuando se encontraron pruebas de que marcaba aún más sus cejas para controlar su imagen.
No por ello quería dar una imagen descuidada, de ahí que esta pintora mexicana de ascendencia alemana combinase esta agresiva protesta estética con estampados, bordados y flores que le daban un punto de feminidad. De hecho, siempre que pensamos en Frida Kahlo nos viene a la cabeza el color.
En otras ocasiones su estilo no solo se definía por su gusto, sino por sus limitaciones físicas como en el caso de los corsés que utilizaba por tratamiento ortopédico, al igual que los calzadores que utilizaba para igualar las piernas, de distinta longitud a causa de una grave enfermedad.
Sea como fuere, su fuerte personalidad reivindicativa y activista, así como su peculiar estilo, han conseguido convertirla en un símbolo, un icono que ha superado a la persona y que, sin duda, se ha sobre-explotado hasta difuminar el peso histórico de Frida entre mito, fakes y realidad.
A colación, nos vamos con una de sus citas célebres:
«Es tan desagradable sentir que una mujer es capaz de vender cada pedacito de sus convicciones o sentimientos sólo por la ambición de dinero o escándalo». Frida Kahlo