Las tendencias en decoración con más éxito del 2020
A finales del 2019 echamos un vistazo a las tendencias que nos esperarían este 2020 en decoración (ver tendencias http://elrincondeika.es/tendencias-decoracion-2020/). Tras unos meses de un 2020 caótico a nivel mundial, encontramos que el mundo de la decoración ha sufrido un fuerte impulso gracias a los confinamientos y las ideas DIY.
Hoy repasamos las tendencias que más han calado finalmente y hacemos un repaso de las tendencias que se esperan en los próximos meses.
Reconectando con la naturaleza
Una de las tendencias esperadas para el 2020 era, como hablamos hace tiempo, la Biofilia que, apoyada sobre otras tendencias del momento como el Japandi o el Estilo Nórdico, se basa en la conexión con la naturaleza para mantener el equilibrio. Obviamente, la situación ha provocado que se revalorice esta tendencia al pasar tanto tiempo en casa, especialmente en países como España, donde la conexión con el mundo exterior y “la calle” es casi necesario para nuestro estado anímico.
Así, los materiales naturales y orgánicos, como la madera, la piedra y la cerámica, serán protagonistas, junto con la luz natural y la vida vegetal, para una amplia variedad de estilos. En este sentido cabe destacar cómo los revestimientos de mármol y piedra natural son un must para este año 2020; una tenencia que se potencia gracias a las alternativas del mercado que simulan materiales naturales reduciendo costes, pesos respecto la piedra real, etc.
Estilos para conectar con la naturaleza del 2020
Si el Japandi ya nos introdujo esa conexión natural, el Estilo Nórdico, centrado en conseguir espacios confortables para climas donde se pasa mucho tiempo dentro del hogar, potencia mucho la luminosidad dentro de esos detalles en madera y adornos vegetales con el blanco y los colores neutros como protagonistas.
En este sentido la Decoración étnica o boho chic, con una combinación de elementos naturales y detalles étnicos y bohemios, es uno de los estilos que entró con fuerza en el mercado y se resiste a salir de él con una mezcla de materiales naturales, estilo mediterráneo y ecos étnicos.
En contraste, la decoración industrial, con su inconfundible toque retro, sigue estando muy presente, aunque intenta incluir pequeños elementos como plantas discretas para crear sensación de vida en el espacio con los elementos estructurales a la vista y los muebles vintage que caracterizan a este estilo.
¿La clave? Optimizar espacios
Igual que hemos observado que la naturaleza entra en el hogar para recordarnos una conexión que afecta incluso al estado anímico, la optimización de espacios y la creación de espacios abiertos será otra de las claves de las nuevas decoraciones de 2020.
Por ello, los vidrios y el metacrilato van ganando protagonismo día a día, potenciando la iluminación de los hogares y oficinas. Una de las ventajas de los vidrios y materiales transparentes o traslúcidos es que permiten adaptarse a cualquier estilo de decoración, ya que puedes incluir incluso colores o vidrieras más complejas para ello.
La funcionalidad es clave dentro de un año marcado por la reestructuración y la tecnología que nos ha permitido evolucionar como sociedad. Por ello, además de espacios más abiertos, se busca que la decoración tenga utilidad, optimizando cada metro cuadrado del espacio e, incluso, con muebles de doble funcionalidad como el típico armario que se convierte en mesa, etc.
En realidad esto ya se notaba desde años atrás en los que las viviendas cada vez son más reducidas, especialmente en el caso de grandes ciudades, pero ahora se hace imprescindible para cubrir todas las necesidades del espacio.
La sencillez en su máxima expresión
El minimalismo es una corriente que año tras año nos acompaña, pero en un mundo donde el contacto ha sido enclaustrado, de pronto es más necesario que nunca mantener las superficies despejadas y se combina con el resto de estilos de decoración. Además, es una buena forma de poner en orden todos los elementos del espacio, desechando aquello que no es esencial.
¿Su clave? simplificar al máximo y dejar de lado todos aquellos elementos que no sean esenciales para la funcionalidad, por lo que para evitar un estilo decorativo demasiado soso o aburrido se juega con elementos para dar dinamismo como la mezcla entre maderas y piedras, los textiles y las tonalidades.
Esto ha causado que encontremos mezclas enriquecedoras en los espacios de materiales y texturas, tanto en los espacios como en los propios muebles que combinan y buscan la armonía del color, rompiendo la sobriedad de ese pasado en el que la decoración pasaba por crear unidad de estilo y texturas.