Especial Septiembre: Rutina de cuidados Post Verano para la piel
El verano llega irremediablemente a sus últimos coletazos y la realidad se impone. No solo volvemos a la rutina, sino que debemos reparar todo el daño causado a la piel por los excesos del verano. El aumento de la exposición solar, el cambio de clima, la deshidratación,… son muchos los factores del verano que alteran el estado de la piel saludable y bastan pequeños hábitos para mantenerlos bajo control.
Además, poco a poco volvemos a sufrir un cambio de clima donde los días cada vez serán más cortos, tendrá lugar la caída de las hojas de los árboles y el descenso de la temperatura dará paso a una vida menos hacia el exterior. Esto sumado a la vuelta de vacaciones puede provocar el famoso estrés post-vacacional que también puede derivar en más afecciones de la piel como hipersensibilidad o brotes de acné.
Repasamos los cuidados de la rutina de cuidados Post Verano perfecta para iniciar en Septiembre y entrar en el otoño con los cuidados adecuados.
Limpieza y exfoliación
El primer paso para recuperar la piel tras el verano es realizar una limpieza en profundidad. Visitar a un profesional estético es buena idea para recibir un tratamiento profundo y adecuado. Si no tienes esa posibilidad, debes incluir algunos elementos básicos en tu rutina para mantener un correcto cuidado post-verano.
- Limpieza facial en profundidad. La rutina de limpieza diurna y nocturna es un must de todo el año. En la rutina post estival necesitarás adaptar los productos a tu piel. Es posible que tu piel esté más seca, por lo que debes evitar abusar de limpiadores que puedan resecar la piel como las aguas micelares o los geles y optar por productos más suaves como las leches limpiadoras. Además, es fundamental utilizar el tónico facial para ayudar a reducir los poros, normalmente más dilatados por el clima veraniego.
- Exfoliación facial. Para fijar el bronceado, unificar el tono y eliminar las células muertas es importante realizar una exfoliación facial. Si la realizas en casa puedes optar por una exfoliación mecánica, química o gommage, según tu caso, una vez a la semana. Recuerda que puedes ver cuál es el peeling más adecuado para ti en nuestro artículo sobre los distintos tipos de peelings.
- Exfoliación corporal. Al igual que en el caso del rostro, la piel corporal se ve afectada durante el verano. Además de los síntomas comentados, podemos notar un engrosamiento de la piel, por lo que la exfoliación corporal es vital para mejorar la suavidad y textura de la piel; en todos los sentidos. Recuerda que esto incluye también a las manos y los pies, esos grandes olvidados que tan de utilidad nos sirven cada día.
Hidratación y reparación
Dentro de la rutina de cuidados para el Post Verano, debemos prestar especial importancia a la hidratación y reparación de los tejidos. Ten en cuenta que las consecuencias sobre los excesos durante el verano, comienza a sentirse en la época postvacacional y el principio del otoño.
El objetivo de la rutina de cuidados post-verano es evitar el envejecimiento prematuro y corregir las afecciones de la piel volviendo a rutinas de tratamiento y cuidados; se ve claramente en los tratamientos blanqueadores más agresivos que se habían paralizado durante el verano.
Será fundamental reponer el nivel de hidratación en la piel y adaptar la rutina de belleza con mascarillas, cremas y serums adecuados para cada afección y tipo de piel. En general, tras el verano pueden verse distintos problemas en la piel en los que debes fijarte a la hora de elegir tu crema, serum y mascarilla para el cuidado post-verano:
- Hidratación. El exceso de calor aumenta la evaporación reduciendo los niveles de humedad y generando una incómoda la falta de elasticidad, que, además potencia la aparición de líneas y arrugas. Además, en otoño la deshidratación de la piel también estará muy presente, debido al cambio de temperatura y a la propia caída de las defensas. Elegir cremas hidratantes adecuadas al tipo de piel será fundamental para restaurar la cuota hídrica.
- Manchas. Las manchas aparecen o son más visibles a medida que el bronceado se estabiliza. Muchas veces se forman por la oxidación del verano y, otras, por daños celulares más profundos que requerirán un tratamiento más en profundidad. Lo importante es tener claro que a mayor profundidad de la mancha más complicado será combatirla. En este sentido, te recomiendo echar un ojo a los especiales sobre Hiperpigmentación de la web para elegir el tratamiento más adecuado y entender el origen de tus manchas.
- Envejecimiento prematuro. Las líneas de expresión, las arrugas o la flacidez por la ruptura de la estructura dérmica son algunas de las consecuencias del envejecimiento prematuro. La degradación celular se acelera por la incidencia de los rayos UVA sobre la piel y la deshidratación ayuda a incrementar la visibilidad de las arrugas. Elegir productos cosméticos con antioxidantes será fundamental para corregir y reparar todo ese daño.
- Sensibilidad. Las agresiones veraniegas incrementan las reacciones de la piel, como se ve claramente en zonas que han sufrido quemaduras, pero no serán las únicas áreas con mayor sensibilidad. La falta de hidratación de lugar a descamación, rojeces, tiranteces y otros síntomas que conviene controlar en tu rutina de cuidado facial tras el verano. En estos casos, es importante elegir cosméticos reparadores específicos para la sensibilidad que habitualmente cuentan con activos suaves que ayudan a restaurar las necesidades de la piel y reforzar la barrera cutánea.
- Brotes de acné. El verano y la piel grasa no es la mejor combinación. La falta de hidratación da lugar a alteraciones en la barrera hidrolipídica de la piel y la acumulación de células muertas puede provocar distintas afecciones, desde brotes de acné a pieles asfixiadas. Para combatirlo, estas pieles deben utilizar productos que incrementen la hidratación y regulen el sebo para equilibrar y restaurar la piel. En estos casos los peelings suelen ser algunos de los elementos de rutina fundamentales en el caso de la piel asfixiada para ayudar a oxigenar el tejido.