Organizar una oposición puede ser una tarea complicada que requiere dedicación y constancia para salvar la alta competencia de todas las personas que buscan una salida laboral estable. Entre los factores que debes tener en cuenta, lógicamente, es importante contar con las Agendas Académicas para organizar el temario; pero también es imprescindible conseguir una rutina que nos permita no olvidarnos de descansar y tener tiempo libre.
Por ejemplo, ¿Te ha pasado alguna vez que tras horas estudiando finalmente solo recuerdas una parte? Está demostrado que puede ser mucho más efectivo no sobresaturar con el temario para conseguir que los contenidos se fijen mejor en la mente.
Te damos algunos consejos para aprender a organizarte de cara a la preparación de una oposición.
Antes de decidir presentarte
Seguramente si has llegado hasta este post es porque ya tienes claro el camino a seguir. No obstante, a la hora de organizarse para una oposición, lo primero es evaluar la competencia, así como el tiempo que requiere; ya que hay oposiciones que pueden sacarse en un periodo corto de tiempo, pero otras pueden extenderse durante años hasta tener la preparación oportuna.
Cuando se organiza una oposición, debes tener muy claro cuál es tu objetivo, cuánto tiempo tienes para prepararte y contar con los recursos adecuados; como en el caso del temario. También es importante revisar las bases de la oposición de cara a asegurarte que cumples con todos los requisitos; un buen ejemplo es la condición física o las titulaciones homologadas.
En algunas ocasiones, las oposiciones conllevan pruebas más allá de los clásicos exámenes; por lo que la preparación debe tener en cuenta todos los aspectos que serán necesarios en cada trámite del proceso.
Cómo organizarse ante una oposición
A la hora de organizar una oposición, lo primero que debemos tener en cuenta es el temario y los periodos hasta la prueba. Personalmente, recomiendo elaborar un plan de estudios que te ayude a gestionar el tiempo.
Recuerda también que es importante fijar tiempos de repaso para conseguir retener todos los detalles. Es importante también seguir técnicas de estudio para ayudar con el aprendizaje como subrayados, resúmenes, mapas conceptuales, esquemas o reglas nemotécnicas.
En muchas ocasiones, es interesante contar con una academia especializada que te ayude a realizar esta tarea; además, normalmente están muy pendientes de los cambios que puedan producirse para mantener a su alumnado bien informado. Si vas por tu cuenta, debes estar muy pendiente de cualquier posible cambio en las condiciones, normativa o temarios; así como ser selectivo y buscar solo temarios que sean oficiales.
Cuando prepares el lugar de estudio, recuerda que debe ser un sitio confortable y tranquilo, sin distracciones y con un buen nivel lumínico para no forzar demasiado la vista. Dentro del horario que establezcas para el estudio, debes evitar posibles distracciones como ruido de fondo, móviles o personas que puedan interrumpir de forma inesperada.
Preparación mental ante una oposición
Durante la preparación para una oposición, es importante estar mentalizado del proceso que se sigue para mantenerse motivado y emocionalmente estable. Por eso es tan importante mantener una rutina que incluya tiempos de descanso. Hay que tener claro que más horas de estudio no siempre supone un mejor rendimiento; como comentábamos al principio del texto.
Un buen ejemplo es fijar objetivos parciales y asumibles para generar una sensación de éxito; evitando el agobio innecesario que, por otro lado, no ayudará a la retención de contenidos. Un truco que siempre ayuda cuando no tienes costumbre de estudiar es arrancar con pocas horas e ir incrementándolas a medida que coges ritmo para evitar saturarte y querer abandonar antes de tiempo.
Realizar una actividad física también puede ayudarte a mantener la mente y el cuerpo alineado, descargando las tensiones y preocupaciones que pueden venir asociadas a la preparación de la oposición.
