#Review Sales de Epsom Nortembio con Vitaminas C y E
Esta semana pasamos por el ojo crítico a las Sales de Epsom de la firma Nortembio. Las sales de Epsom son sales de baño adecuadas para deportistas y personas con dolores o contracciones por sus propiedades relajantes y anti-inflamatorias; por eso, cuando tuvimos la oportunidad de probar estas sales de Epsom enriquecidas con Vitamina C y E no no los pensamos dos veces.
La Sal de Epsom del laboratorio Nortembio está compuesta por cristales de Sulfato de Magnesio puro obtenidas mediante procesos que aseguran la cristalización natural de las sales, lo que nos permite ofrecer un producto de alta calidad.
Primeras impresiones de las Sales de Epsom Nortembio
Las Sales de Epsom Nortembio especiales para el baño se presentan en un frasco de rosca transparente desde el que podemos apreciar unas sales de formato cuidado, con un tono azul inspirador y un formato de 1,25 Kg con un coste algo superior a los 10€ por lo que en el fondo es un producto económico y con buena relación calidad-precio en comparación con otras sales de baño.
Viene con una cuchara medidora para que añadirlas al baño sea una experiencia cómoda. Se trata de un producto que en general me ha gustado como no podía ser de otra forma con un producto relajante, pero debes tener en cuenta que no es un producto de uso profesional y algunas de sus características se alteran rápidamente.
Por ejemplo, en cuanto se abren las sales de baño Nortembio nos embriaga una agradable Fragancia de Coco Tropical muy agradable, pero que, lamentablemente, no es duradero cuando se aplica en el agua, incluso sin añadir otros productos que pudieran modificar el olor.
La mejor forma de reponer los niveles de magnesio en el cuerpo es mediante baños de inmersión con Sal de Epsom, añadiendo unos 7 cacitos a un baño agua templada-caliente (37-39 grados). También se debe utilizar así para utilizarlo como relajante muscular o mediante vendajes humedecidos con una fórmula que incluye las sales.
Experiencia con las Sales de Epsom Nortembio
En general, las Sales de Epsom de Nortembio me han gustado bastante a excepción de ese aroma que tan rápido se pierde en el baño. Especialmente me ha gustado para calmar la inflamación y el cansancio en las piernas, notando la zona de los pies (y el cuerpo en general) mucho más relajada.
Estas sales se disuelven bastante bien en el agua, aunque les cuesta un poco más que otras sales que he probado en el pasado; aún así, no es un punto determinante sobre si comprar o no el producto porque aunque tarde un poco más se disuelve perfectamente en el agua. De hecho, esta durabilidad es uno de los motivos por lo que las sales de Epsom de Nortembio también se pueden aplicar frotando sobre la piel para fomentar una exfoliación en la piel, aunque personalmente prefiero productos específicos para esta misión.
Un punto que me ha gustado y que las ha hecho resaltar respecto a otro tipo de sales es que las Sales de Epsom son altamente relajantes a nivel muscular, calmando mis dolores de espalda; no en vano, están indicadas para deportistas tras realizar ejercicio físico intenso para relajar la musculatura en baños de apenas 20 minutos.
Como curiosidad, también puede aplicarse con la crema de limpieza facial habitual, mezclando unos 15 gr con el limpiador y masajear el rostro humedecido antes de aclarar con agua. No obstante, no he notado grandes cosas al utilizarlo así, por lo que no le he visto mucha utilidad o practicidad a este uso recomendado por la firma.