#Evento Experiencia en el Restaurante Terraza Puertalsol
En pleno centro de Madrid, se encuentra una terraza apuntando hacia el reloj de Sol en las alturas. Se trata del Restaurante Terraza Puertalsol, famoso por estar bajo el control del mediático cocinero Chicote junto al cocinero Pedro Olmedo.
Ubicado en la azotea Prta del Sol, 10, contiene una decoración cuidada que entremezcla gastronomía y arte; así como una carta variada. En concreto, durante esta visita he probado el Menú de 60€ (50€ + 10€ de suplemento por ser fin de semana en terraza). El menú incluye, además de varios primeros individuales y un segundo a elegir, las bebidas, desde cervezas de Madrid, aguas y refrescos, a vino blanco y tinto.
Te cuento mi experiencia durante la comida. Se trataba de una comida informal con amigos, totalmente ajena a la web, de ahí que tenga pocos testimonios gráficos, más allá de las stories que os dejé en las redes ese día.
¿Cómo fueron los entrantes?
El menú del Restaurante Terraza Puertalsol que elegimos se trataba de una opción sencilla, con varias degustaciones individuales en los primeros y un plato a elegir dentro de los segundos. Veamos lo más interesante de cada plato para que te hagas una idea de lo que vas a encontrarte.
- ENSALADILLA RUSA CON LANGOSTINOS con VENTRESCA DE ATUN SOBRE REGAÑÁS. Una ensaladilla clásica con buena presentación que estaba buena, pero no dejaba de ser un plato para abrir boca eclipsada por el pan de la mesa que estaba realmente increíble y que tenía un toque a pan de antaño con aceite de oliva.
- MATRIMONIO DE ANCHOA Y BOQUERÓN CON TOMATE Y ACEITE VIRGEN. Un plato, de nuevo sencillo, que puedes ver en la imagen del texto. Personalmente me encanta el atún así que me gustó el plato aunque fuese un entrante sencillo. Se notaba que la comida era de buena calidad y el aceite le daba ese toque que solo un aceite en condiciones ofrece.
- ALCACHOFA AL CARBÓN CON SALSA DE AJOBLANCO. Para mí, el plato estrella de todo lo que probé esa noche; cosa que no me esperaba para nada. El toque a carbón se aprecia en cada bocado y el ajoblanco era delicado, de textura y sabor muy suave que ayudaba a equilibrar el intenso sabor de la alcachofa.
- CROQUETAS CASERAS DE JAMON IBÉRICO. Con una buena fritura, se apreciaba un toque a alguna especia que no fui capaz de identificar (cilantro tenemos en mente, pero no estamos seguros). La bechamel era densa y la masa compacta, no son las mejores que he probado, pero estaban realmente buenas para una amante de las croquetas como yo.
¿Qué saber de los segundos?
Como comentaba, dentro del menú que elegimos del Restaurante Terraza Puertalsol, los segundos se podían elegir entre una selección; a saber: chipirones a la parrilla con mayonesa de aguacate y habitas, merlucilla al horno con pil pil de aceites orientales, tacos mex de cochinita pibil o carrillera ibérica glaseada al vino tinto y puré de patata trufado.
Tuve la oportunidad de probar la merlucilla al horno con pil pil de aceites orientales que estaba buena y con el pescado en su punto, aunque por mi fama de glotona me hubiese encantado que contase con un poco más de salsa. Las patatas de acompañamiento no eran gran cosa, pero también estaban bien hechas.
También probé la carrillera ibérica glaseada al vino tinto y puré de patata trufado; he de decir que la carrillera estaba muy tierna y el glaseado espectacular, pero no llegué a notar la trufa en el puré de patatas.
Postres y campanazo final
Los postres del menú que probamos en el Restaurante Puertalsol consisten en unos bizcochos variados, uno de ellos era especialmente curioso porque era como un bizcocho con cierta textura a pudding y sabor a leche merengada muy original.
Para rematar la experiencia, llegadas las 12, en esa terraza que invita a soñar en nochevieja, nos permitieron revivir las campanadas con sus 12 dulces uvas sin pepitas.
¿Qué me pareció en general la experiencia?
Sin duda, lo mejor del Restaurante Terraza Puertalsol es la ubicación; ya que por excelente que fuese la comida es una ubicación exclusiva y de ensueño si tienes la oportunidad de sentarte en la terraza.
Lo segundo a destacar es el personal. Atento, agradable, pero sin confianzas. Un buen equilibrio que puede llegar a resultar peligroso sino controlas lo que comes y bebes porque nunca verás una copa vacía o que falte pan en la mesa.
Respecto a la comida, me parece que el Restaurante Terraza Puertalsol tiene una excelente relación calidad-precio. No pretende venderte un menú hiper-exclusivo, sino comida de buena calidad, un volumen como para quedarte satisfecho y platos con un toque especial, pero no demasiado enrevesados; cosa que agradezco.
De hecho, esta reseña no forma parte de ninguna colaboración ni saben que estuve allí ese día, pero merecía la pena contaros la experiencia.